Las 5 grandes ideas-fuerza detrás del libro "La encrucijada de la Cuncuna", se resumen a continuación:
- El profesor de personas
- El dialogo constructivo
- La educación como servicio comunitario
- La responsabilidad de educarse
- El aprendizaje integral
El profesor debe especializarse en el desarrollo humano integral, puesto que su función principal es conducir a sus estudiantes hacia la autonomía. Su principal método para estos efectos es el diálogo en el sentido propuesto por David Bohm, un intercambio multidireccional de ideas e información, que enriquece a todos los participantes. Ambos, el estudiante y el profesor, deben estar conscientes de que el proceso que están viviendo es un servicio hacia la comunidad, ya que están construyendo las bases del pensamiento, el comportamiento, la cultura y la organización social futura. Todos ellos, profesores y estudiantes, son responsables de su propia educación. Los primeros, en el entendido que la educación es un proceso continuo, permanente y que siempre pueden superarse como profesores aprendiendo de sus estudiantes. Los segundos, comprendiendo que su prioridad en esta etapa es convertirse en la mejor versión de si mismos. Y esta responsabilidad los obliga a ser actores en lugar de espectadores: activos en lugar de pasivos; críticos en lugar de obedientes; opinantes en lugar de oyentes; exploradores curiosos en lugar de pizarras en blanco. Pero esta gran responsabilidad también los invita a desarrollarse equilibradamente, entendiendo que el proceso evolutivo hacia la adultez, requiere un desarrollo armónico del cuerpo, la mente, los sentidos, el corazón e incluso, el alma del ser humano. Así, cada uno va aprendiendo a ser, a hacer, a conocer, a percibir, a convivir, a relacionarse y a realizarse, alcanzando su pleno potencial, para contribuir significativamente al progreso de la humanidad.
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