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domingo, 30 de enero de 2011

Una mirada internacional a la educación

Acabo de terminar de leer "La formación inicial docente en Chile desde una óptica internacional". Informe del IEA TEDS-M. Nuestro país no sale bien parado. Penúltimos o últimos entre 17 países participantes. A pesar del reconocido compromiso de nuestro profesores, el estudio demuestra que tenemos mucho camino por recorrer. En especial señala la insuficiencia de conocimientos adquiridos en educación media y las escasas posibilidades de adquirir estos conocimientos en la educación superior. Lo que más me llamó la atención, sin embargo, fue la dificultad que tienen los profesores para la aplicación práctica de sus conocimientos y la falsa creencia de que estamos haciendo las cosas bien. Refuerza la sospecha de que el mundo académico está desconectado de la realidad.
Las principales sugerencias: generar oportunidades para aprender y modernizar el currículo, deben tomarse en cuenta. ¡Pero para hacer algo concreto!
La sensación positiva que generó el avance detectado en el informe McKinsey puede ser una falsa ilusión. Debemos luchar contra el conformismo. Nuestros jóvenes se merecen mejores oportunidades para competir en un mundo global.

lunes, 24 de enero de 2011

La tecnología es un vehículo

Para explorar el vasto océano de información se necesita un vehículo apropiado.
La tecnología es un medio que nos puede llevar donde queramos. Que nos permite buscar conocimientos, intercambiar ideas o investigar. Es el vehículo apropiado para el explorador del siglo XXI.
El navegante del universo del conocimiento necesita aprender a dirigir su búsqueda, a tomar control de su viaje y aventurarse sin riesgos hacia las respuestas que le permitan hacerse nuevas e inquietantes preguntas.
Para ser dueño de su destino, el explorador del siglo XXI debe manejar las técnicas más avanzadas de exploración. Ser eficiente en sus búsquedas. En este sentido, los jóvenes de esta generación, nativos digitales, inquietos y curiosos, poseen la semilla adecuada para convertirse en descubridores de nuevos mundos.
Tengo profunda fe en nuestra próxima generación. Sabrán encontrar soluciones a los desafíos que les hemos legado. Si les queremos heredar un futuro promisorio, debemos enseñarles a manejar el computador, a aprovechar los avances tecnológicos.
Los profesores del siglo XXI, deben facilitar el aprendizaje virtual. Deben reconocer el talento de esta generación para navegar y regar la semilla de la curiosidad intelectual, poniendo al alcance de sus alumnos la herramienta más eficiente para aprender: la tecnología.

domingo, 23 de enero de 2011

La educación altruista


Los síntomas son cada vez más evidentes. La sociedad está enferma. Crisis energética, crisis medioambiental, violencia, delincuencia, pobreza, hambruna, obesidad, por mencionar algunos.
El problema está en las creencias que tenemos de las motivaciones del ser humano.  Hemos desarrollado la economía en base al supuesto de que el ser humano es egoísta. Que sus motivaciones principales serían la búsqueda de riqueza y el interés personal. Y en parte, es cierto.
Sin embargo, desconocer la dimensión altruista del ser humano genera modelos distorsionados de la realidad y produce desequilibrios importantes que finalmente generan síntomas evidentes de una sociedad enferma.
La pobreza es síntoma de la acumulación indiscriminada de riqueza generada por la dimensión egoísta del ser humano.
El calentamiento global es síntoma de la explotación indiscriminada de la naturaleza.
El ser humano es dual, como una moneda de 2 caras: egoísta y a la vez, altruista.
Cualquier empresa que considere solo una dimensión de este, generará desequilibrios que comprometerán su estabilidad en el largo plazo.
Muhammad Yunus, premio Nobel de la Paz 2006, propone en su libro, “Empresas para Todos”, la creación de empresas dedicadas a ayudar a los demás, cuya misión sea ponerle fin a un problema social. Estas empresas ayudarían a equilibrar a la sociedad puesto que tomarían en cuenta la naturaleza altruista del ser humano. Las llama “empresas sociales”.
Una de las cosas que más me llamó la atención de esta proposición es su declaración de quienes trabajan en este tipo de empresas ”lo hace con alegría”. Disfrutan su trabajo. Son felices ayudando a los demás. Sostiene que estas empresas toman en cuenta el carácter dual del ser humano: trabajando por los demás logran la satisfacción personal de sentirse creando un mundo mejor.
Me interesa explorar la posibilidad de crear empresas altruistas en el área educacional. Es un área donde el gobierno necesita colaboración. Donde muchos entran por vocación de servicio, pero pocos logran emprender desinteresadamente. La educación pública está fracasando estrepitosamente. Tal vez sea el momento apropiado para proponer un nuevo modelo: la educación altruista, diseñada para ser autosostenible, sin fines de lucro, de propiedad de profesores que reinvierten cualquier superávit en mejorar la educación que imparten.

viernes, 21 de enero de 2011

Educar es un privilegio

La transformación que queremos lograr, se reduce a convencernos que "educar es un privilegio". En primer lugar, hay que convencer a la sociedad, y provocar una mirada más positiva hacia la educación(lo que redundará en mejores remuneraciones y reconocimiento a los docentes). Pero también hay que convencer a algunos profesores. Es cierto que hay muchos comprometidos y realizados, pero no es menos cierto que hay otros, frustrados por el sistema y por la ausencia de recursos. En el fondo, queremos profesores contentos, puesto que esto ayuda a que produzcan clases motivadoras, entretenidas e inspiradoras. Por otro lado, hay que convencer a muchos estudiantes. A los que están en el colegio, para que respeten a sus profesores y eventualmente consideren seguir su camino. En definitiva que "aprecien el aprendizaje". Y los que estudian pedagogía para que se esfuercen al máximo y comprendan que "educarse es una responsabilidad".
Invito a ustedes a sumarse al cambio cultural que nos lleve a convencernos que:
Educar es un privilegio (para unos pocos y afortunados elegidos) y educarse es una responsabilidad (permanente, para todos).

jueves, 13 de enero de 2011

Nada nuevo

Ayer, una profesora inteligente, entusiasta, enérgica y segura de si misma, me dijo: "En su discurso, no hay nada nuevo. Todo lo que usted propone, lo sabemos".
Probablemente es cierto, pensé...Y es justamente eso lo curioso. Si todos coincidimos en lo que hay que hacer, ¿porqué nadie hace algo al respecto? ¿Qué es lo que nos impide actuar? Tal vez sea justamente esa rara característica del mundo académico, que propone teorías, genera ideas y sin embargo, se resiste a emprender. Es un mundo donde hay muchos compositores y pocos concertistas. Muchos escritores y pocos actores. Bueno, ahora me pregunto, ¿que pasaría si nos arremangamos la camisa y hacemos lo que hay que hacer?

lunes, 3 de enero de 2011

Enseñar a emprender


Proponemos una enseñanza diseñada para cultivar sueños, a perseguirlos y luchar por hacerlos realidad; en un ambiente estimulante, innovador e inspirador. En suma, enseñar:
o  A solucionar problemas
o  A participar
o  A liderar
o  A comunicar eficazmente
o  A hacer la pregunta adecuada
o  A aprender de los errores
o  A vender ideas
o  A no rendirse
o  A pedir ayuda
o  A encontrar soluciones creativas
o  A ver la otra cara de la moneda
o  A tener perspectiva
o  A detectar oportunidades
o  A tomar decisiones
o  A desarrollar talentos
o  A desafiar paradigmas
o  A atreverse
o  A superar obstáculos
o  A diseñar nuevos caminos
o  A recorrer nuevas rutas
o  A pensar lateralmente
o  A ser diferentes, únicos
o  A esforzarse por un objetivo
o  A desarrollar fuerza de voluntad
o  A trabajar en equipo
o  A agregar valor
o  A anticiparse a las necesidades

domingo, 2 de enero de 2011

Misión Imposible


Nuestra misión, si estamos dispuestos a aceptarla, es generar:

¡Una nueva educación, orientada a enseñar a aprender!

Necesitamos transformar la educación para los requerimientos del siglo XXI, formando una nueva clase de profesores: exploradores del conocimiento, administradores de información, arquitectos del carácter, diseñadores pedagógicos, doctores del espíritu, modelos de comportamiento, profesionales prestigiosos, con conciencia social y medioambiental; comprometidos en enseñar a aprender.

La transformación de la enseñanza, entregando al estudiante la responsabilidad de aprender es un cambio cuántico. Es cambiar el rol del profesor desde el experto a un guía. Es transformar la clase expositiva en una aventura de exploración conjunta, ¡es convertir a los espectadores en actores! ¡Es enseñar a aprender!